Todo el mundo tenemos la típica camiseta con alguna mancha que no va a desaparecer jamás, demasiado gastada, algo desteñida… Hoy os traigo una solución para poder seguir utilizándola!
Se trata de decolorarla con lejía. Es muy fácil y además podéis ser todo lo creativos que queráis, podéis decolorar la parte de abajo como yo, o tan solo la de arriba, algún detalle en las mangas, etc.
Lo único que tenéis que tener en cuenta es que con la lejía hay que tener mucho cuidado y proteger todo para que no decolore lo que no queremos.
Para hacerlo vais a necesitar:
-Una camisa, si es oscura saldrá mucho mejor.
-Lejía
-Agua
-Guantes para protegernos
¡Espero que os guste!
¿Te ha gustado?
Introduce tu correo electrónico y recibe todas las semanas artículos como el que has leído